Unidad y transparencia

Tras un periodo dedicado a otros temas, empiezo ahora una serie dedicada a un tema que me afecta personalmente, así como a 1.500 compañeros de trabajo. En mi empresa nos van a hacer un ERTE (un Expediente de Regulación Temporal de Empleo) a 1.500.

Hace once meses, una nota de prensa de la empresa nos informaba de lo siguiente:
“Atos Origin, compañía líder de servicios de TI, ha recibido el sello de calidad de Recursos Humanos Top Employers 2009, que otorga el CRF Institute para distinguir a las mejores empresas para trabajar en España.”

“El sello Top Employers 2009 reconoce a Atos Origin como una de las empresas que cuidan mejor el talento, ofrecen un ambiente de trabajo más agradable y son socialmente responsables. Los criterios para otorgar la distinción puntúan estrictamente actitudes y hábitos en el ámbito de la Dirección y Organización de personas. Se analiza la comunicación y la transparencia, la ética profesional, la implicación de los empleados y el compromiso de la dirección para evaluar el ambiente y la cultura de trabajo.”

Hoy, once meses después de este “gran premio”, quieren echar a la calle (¿temporalmente?) a 1.500 trabajadores.

Nuestra empresa la dirige, desde Francia, Thierry Breton, ex ministro francés de Hacienda y ex presidente de France Telecom. Es una compañía internacional que cuenta con unos 50.000 empleados, de los cuales unos 6.000 estamos en España. El 23 de abril de este año se destituyó al Director General de España, Diego Pavía, presidente también de la Asociación Española de Consultoría. Desde este puesto se ha dedicado a hundir el mundo informático español, siguiendo el ejemplo del jefe de la patronal, Gerardo Díaz Ferrán. Desde 2006, fecha en que fue elegido presidente de la patronal de consultoría, ha cumplido su misión: eliminar los derechos laborales y económicos de los trabajadores, aún a costa de hundir su propia empresa. Tenía que dar ejemplo y así lo ha hecho.

Su sustituto ha venido con la tijera en la mano y ésta es la primera medida importante que toma: despedir (¿temporalmente?) a 1.500 trabajadores, medida que toma como culmen del desvío de negocio y centros operativos hacia Marruecos.

Del papel que están jugando los sindicatos, hasta el momento, en todo este proceso, prefiero no comentar. Bastante cera están recibiendo desde la derecha más extrema, a la que pertenecía y apoyaba Diego Pavía, para que yo colabore a su desprestigio. Os dejo los enlaces de las secciones sindicales de AtosOrigin para que cada uno saque sus propias conclusiones. CCOO-AtosOrigin, CGT-AtosOrigin, UGT-AtosOrigin

Todos los trabajadores hemos recibido varias notas de los sindicatos y ninguna de la empresa. De los sindicatos, sólo una conjunta, en la que informaban de que la empresa les había comunicado que se iba a hacer el ERTE. A partir de ahí, varias notas de cada uno donde no se aclara mucho más el tema.

El ERTE ya está presentado el día 1 de octubre y hay un plazo de 10 días para que los sindicatos puedan exponer su opinión.

Y no hay más datos. Nadie nos informa del número exacto de empleados de la empresa; nadie nos informa de los beneficios-pérdidas de la empresa en 2009, nadie nos informa de cómo ha caído (si es que ha caído) el negocio en 2010 y por qué; nadie nos informa de cuánto dinero está recibiendo la empresa en subvenciones por parte de las distintas administraciones europeas, españolas y locales; nadie nos informa de cual es el volumen de negocio de la empresa con estas administraciones. Ni de si hay un plan de viabilidad detrás de ese ERTE, y en qué consiste. Podría seguir.

Es importante saber estos datos, como mínimo, para poder saber qué postura se debe tener. 1.500 me parece simplemente un número, detrás del cual hay 1.500 trabajadores y 1.500 familias. Pero si me hubieran dicho 500 o 3.000 seguiría sin saber si es un número adecuado o no, ya que sin datos es imposible analizar.

No se trata ahora de sacar pecho para ver qué sindicato es el que dice la frase más ingeniosa contra el empresario. Se trata de tener datos para ver si se puede permitir a la empresa que haga esta, en principio, barbaridad, o si tenemos que denunciarla ante las distintas administraciones de las que recibe subvenciones y que, además, forman parte de su negocio.

Es necesaria unidad sindical para luchar por todos los puestos de trabajo que se pueda. Y es necesaria transparencia para que, con los datos en la mano, podamos saber si la empresa se ha pasado tres pueblos o si, al contrario, ha hecho todo el esfuerzo posible.

A la empresa la asesora el bufete de Garrigues. El que conozca su poder, no por la capacidad de sus abogados, sino por los contactos que tienen en todas las administraciones, entenderán que los trabajadores estamos listos para ser pisoteados.

En el título de esta entrada reclamaba unidad y transparencia. Es lo único que nos puede salvar.

Continuará….